La mayoría de parques “principales” de cada ciudad o municipio del país, suele llamarse Plaza o parque Simón Bolívar, en honor a quien comandó las campañas libertadoras. Para enfocarnos en tres ciudades capitales, pertenecientes al triángulo del café: Manizales, Pereira y Armenia, tienen en sus plazas, monumentos que se relacionan también a la imagen de Bolívar, y además, una irregularidad que rompe el patrón ¿Cuál patrón? Te estoy contando más adelante, para ver porque nuestra ciudad, Armenia, se vuelve más interesante en la región.
Un artista en común, un gran escultor
Rodrigo Arenas Betancur, fue un escultor y escritor que nació en Fredonia (Antioquia) pero que tiene su obra en diferentes ciudades del país, una trayectoria que le permite ser reconocido como uno de los mejores escultores que ha tenido el país, teniendo sus obras como punto de referencia en muchas plazas, parques y universidades, en Colombia y México.
Arenas, es el autor de las obras por encargo de los monumentos que serían conmemorativos y en honor a Simón Bolívar en Manizales y Pereira.
Bolívar Cóndor: Es el monumento de la plaza de bolívar en Manizales, donde el concepto y la relación entre esta ave de los andes y el libertador, deja una sensación estética de dolor, poder, libertad, esperanza. Sin duda, una obra de arte esculpida por las manos de Arenas, que rompe con la tradición y frialdad con que se representaba a Simón Bolívar. (Una obra hecha en Octubre de 1991).
Bolívar Desnudo: Este se encuentra ubicado en la plaza que lleva el nombre del libertador, en la ciudad de Pereira. Un territorio de libre pensadores, de personas aguerridas que buscaron el dinamismo de la región, nuevos caminos. El reconocimiento de la humanidad, de la luz y el espíritu de libertad. Un Simón Bolívar sobre su caballo, desnudo, llevando en su mano una antorcha. (Una obra hecha en 1963).
¿Y en Armenia? ¿Qué monumento de Bolívar?
En la plaza de bolívar de la ciudad milagro, junto a la gobernación, se encuentra un soporte de cemento que a veces por su altura pierde visibilidad el monumento que reposa allí, Un Simón Bolívar de pie, que pasa desapercibido. No se vuelve relevante, menos frente a una plaza abierta, con una catedral que presenta un diseño diferente a las otras catedrales de ciudades capital y en el otro extremo de la plaza, la escultura del maestro Arenas, un ícono de los Cuyabros. No está relacionada al libertador y aquí encontramos el punto de diferencia. En Armenia, el monumento más visible y más importante de la Plaza de Bolívar, no es Simón Bolívar.
El monumento al esfuerzo, se levanta apuntando al cielo como señal de esperanza, resistente aún a los tantos grados del terremoto de 1999.
Esta es una escultura del año 1978, que nos aclara las narrativas de un grupo de personas cívicas, de Cuyabros y Quindianos orgullosos de su iniciativa para generar desarrollo en el que sería el departamento más joven de Colombia. Arenas, se inspiró en Horizontes de Francisco Cano, una obra que muestra dos campesinos con un bebé en brazos, señalando el horizonte. Así mismo, el monumento al esfuerzo, habla de la proyección a un mañana, el trabajo en conjunto y la capacidad de poder construir territorio.
Como bien lo dice el himno del departamento “Salve tierra de pioneros y de arrieros y del sol. Salve casta del abuelo que sembró su corazón.” El Quindío, hace un reconocimiento en el parque principal de su capital, no al libertador, a las personas que abrieron caminos, que construyeron poco a poco, planificaron el desarrollo e hicieron posible la ciudad milagro, que sigue renaciendo con su gente pujante.
